Concretamente, se han tramitado cuatro denuncias consideradas faltas leves o de grado medio, mientras que hay otras cinco en revisión. En cuanto a residuos, se han identificado a dos personas que han depositado material en el camino de Sa Tortuga y en el camino de Son Mesquida. En los dos casos los guardas rurales encontraron documentación para identificar a la presunta persona infractora. Los responsables de los hechos, que habían dejado basura, restos de poda o voluminosos al lado de los contenedores, han manifestado "desconocer la ordenanza" y se han mostrado colaborativos, retirando los residuos.
Por lo que hace referencia a las infracciones por animales de compañía, se han puesto dos sanciones más. Una de ellas por tener dentro de jaulas un total de nueve perros y 34 gatos en una finca situada en los alrededores del polígono de Son Colom. La persona propietaria de los animales presentó la documentación de la mayoría de ellos, reconociendo que dejó de vacunarlos anualmente. Esta persona, además, no estaba inscrita en el registro de núcleos zoológicos de las Illes Balears. La otra infracción se ha producido por no adoptar las medidas necesarias que permitan que el animal circule en las condiciones adecuadas.
La regidora de Medio Ambiente, Catalina Soler, ha manifestado que "es una lástima que en el siglo XXI la gente solo entienda y aprenda a base de sanciones. El medio ambiente es responsabilidad de todos. Poder tener y disfrutar de tu municipio más limpio también es responsabilidad de todos. No queda más remedio que seguir imponiendo más sanciones e incrementar la vigilancia por la irresponsabilidad de una parte de la ciudadanía".
El servicio de vigilancia medioambiental se puso en marcha el pasado mes de febrero con dos agentes y tiene como objetivo mantener el municipio sin vertidos ilegales, así como controlar el turismo de residuos. Desde el Consistorio recuerdan que una infracción leve por incumplir la ordenanza municipal para la recogida de residuos municipal y limpieza de espacios públicos puede ascender hasta los 750 euros. El hecho de abandonar residuos en la vía pública o en cualquier otro punto diferente a los previstos para tal efecto está prohibido por la ordenanza municipal. Del mismo modo, desde el Ajuntament señalan que aquellos propietarios de un animal que incumplan con la vacunación de carácter anual, recogida también en la ordenanza municipal, se enfrentan a una sanción que puede llegar a los 1.502,53 euros por cada animal.