Cort llegó la semana pasada a un acuerdo para limitar el espacio de las terrazas de bares y restaurantes con tal de recuperar espacio público, conseguir un equilibrio entre la actividad económica y el descanso de los vecinos y mejorar la accesibilidad de personas con diversidad funcional. Un acuerdo en el que no deja satisfecho a nadie.
Es por eso que restauradores de la zona de Santa Catalina de Palma han acudido este jueves a la sesión plenaria del Ajuntament, en la que previsiblemente se tendría que haber aprobado. El equipo de gobierno de Cort no ha tenido un pleno tranquilo este jueves.
Sin embargo, la Ordenanza Municipal de Ocupación de la Vía Pública todavía tiene una vía abierta, ya que los partidos de la oposición pueden presentar alegaciones hasta el día 25, motivo por el cual aún no se ha aprobado definitivamente.
Por su parte, la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma se queja de que el acuerdo no haya sido llevado al pleno ya que, de esta manera, su aprobación y posterior aplicación pueden retrasarse hasta después de comenzar la temporada turística.
Asimismo, los vecinos del barrio del Camp Redó también han estado presentes en el pleno del Ajuntament de Palma para quejarse del abandono que sufren por parte del equipo de gobierno municipal.
