¡Desmelénate!
Durante años se impusieron cánones de belleza muy estrictos a las mujeres. Ser bella era sinónimo de tener un buen matrimonio, un buen trabajo e incluso de ser feliz y tener una vida perfecta. ¡Nada más lejos de la realidad!.
Hoy en día cada vez hay más chicas que han roto con esos cánones tan estrictos y encorsetados. Cada vez es más común ver a mujeres a las que, tal vez les sobren quilos, pedir doble ración de postre y reír a carcajadas. Son mujeres felices y sin complejos.
¿Pero que pasa con todas las mujeres que aún no han conseguido superar las absurdas normas de belleza que la sociedad nos impone constantemente? Normalmente viven infelices porque no alcanzan las expectativas que ellas mismas tienen de ellas.
Así que... ¡Desmelénate! Olvídate de los cánones antiguos y empieza a disfrutar de tu vida. Si el pelo está brillante o si el maquillaje no es perfecto, es lo que menos importa. Lo que prima es la naturalidad. ¡Ánimo, desmelénate!