El nuevo SPECT-TAC es una tecnología híbrida, que aúna las posibilidades de estudio metabólico de una gamma-cámara con la capacidad de visualización anatómica de un TAC de última generación, para un mejor diagnóstico de procesos oncológicos, patologías óseas, nefrológicas o cardíacas, entre otras, así como para el desarrollo de estudios pre-quirúrgicos y terapias de cánceres tiroideos, hipertiroidismo, etcétera.
Con el equipo híbrido SPECT-TAC de Juaneda Hospitales es posible realizar un TAC de manera que, en una única exploración, sin mover al paciente de la camilla, se puede visualizar de forma simultánea una imagen funcional y una imagen morfológica, con lo que se consigue una localización exacta de la lesión y por tanto, una mayor afinidad diagnóstica.
El Servicio de Medicina Nuclear de Juaneda Hospitales está dirigido por la doctora Cristina Peña, especialista en Medicina Nuclear y cuenta con la doctora Catalina Sampol, experta en cirugía radioguiada, la nueva incorporación de la Dra. Nuria Orta, experta en cardiología nuclear, así como de la radiofarmacéutica Margarita Galmés, que se ocupará de la preparación y procesado de los radiofármacos para cada paciente.
El servicio incorpora y ofrece nuevas posibilidades diagnósticas, como estudios de amiloidosis, malabsorción de sales biliares y detección del ganglio centinela en tumores ginecológicos, entre otros.
El nuevo Servicio de Medicina Nuclear de Juaneda Hospitales mantiene su actividad en terapia metabólica en procesos de cáncer de tiroides e hipertiroidismo, c0n una habitación específica para tal fin, y amplía en esta nueva etapa su cartera de servicios, ofreciendo la terapia con Ra223 para pacientes con metástasis óseas en cáncer de próstata.
"La Medicina Nuclear —explica la doctora Cristina Peña— es la especialidad médica que mediante el uso de radiaciones ionizantes permite la realización de diagnósticos y tratamientos. Al paciente se le administra una dosis de radiofármaco, generalmente por vía endovenosa, seguro y de fácil eliminación".
Posteriormente, mediante la gammacámara se obtendrán imágenes metabólicas, que con el nuevo equipo se superponen a las imágenes anatómicas de la zona de estudio obtenidas con el TAC. La gammacámara transforma la radiación gamma (que emite el paciente tras la administración del radiofármaco) en una imagen que refleja el funcionamiento de las células u órganos que se están estudiando. "Es decir, —añade la doctora Peña— obtenemos imágenes metabólicas, a diferencia de las imágenes de radiología, que informan sólo de la morfología".
Con las imágenes de medicina nuclear "podemos detectar variaciones en el funcionamiento de cualquier órgano o sistema". Dado que los cambios funcionales son mucho más precoces que los cambios anatómicos, el estudio nuclear se adelanta en la detección de los problemas a lo que sería un simple estudio de alteraciones morfológicas, visualizadas mediante radiografías, ecografías o TAC". El estudio nuclear permite identificar más precozmente posibles lesiones, su localización y características metabólicas para un mejor diagnóstico y tratamiento de la enfermedad", concluye la doctora Peña.