“Estoy ilusionado con este equipo, creo en él, creo en este proyecto. He venido para estar mucho tiempo y hacer algo que merezca la pena. Sabía que los inicios serían muy difíciles y he dicho que hemos de saborear cada punto porque nos costaría mucho. Este equipo quiere crecer y trabaja duro, pese a que nadie puede estar contento. Queremos y necesitamos tener más puntos. Quedan tres partidos de Liga y uno de Copa antes del parón. Hemos de focalizarnos en eso para sumar puntos”.
“Un partido muy duro y exigente. Sabemos que hemos de hacer un partido muy completo, pero también veo que la igualdad en esta Liga es máxima. Hay mucha exigencia. El Mallorca tiene muy clara su identidad y lo ha puesto muy difícil a todos los rivales. Ha vendido muy cara su derrota. Sabemos que será difícil. Todos los equipos son muy competitivos, cada uno con sus características”.
“Me planteo las cosas a corto plazo o a muy largo plazo. A corto plazo quiero ganar mañana y luego el otro, y el otro. Y a largo plazo, en la jornada 38, que todos estemos felices y ahí será el momento de evaluar qué se ha hecho”.
“Tenemos buenos números en ataque, aunque muchas veces hemos tenido que ir a contracorriente. Sin embargo, eso también tiene una virtud: el equipo nunca se ha rendido y ha remontado muchas veces. Eso habla de compromiso, de fortaleza mental, de las ganas de superación”.