"En cuestión de agua, las Islas Baleares llegamos tarde, demasiado tarde", ha advertido Marga Prohens, quien ha añadido que "estamos para aportar soluciones entre todos, escuchando a todo el mundo, consensuando y dialogando estas soluciones".
En este sentido, la presidenta ha advertido que el sector primario es uno de los más afectados por esta cuestión. Por ello, desde el Govern quieren que el sector se convierta en un “aliado” para combatir el cambio climático y sus efectos. "Debemos sustituir las fuentes convencionales de agua por otras no convencionales. Debemos investigar y nos hemos de reinventar e innovar en este campo", ha destacado Prohens.
Para ello, el Govern impulsará el Plan General de aprovechamiento y optimización de aguas regeneradas para cultivos de regadío. Un plan dotado con 60 millones de euros y que engloba 18 proyectos a ejecutar antes de 2027. Una de las metas del plan es lograr incrementar el uso de estas aguas regeneradas del 42 al 60% en tres años.
"Son dos cosas: mejorar la calidad del agua depurada que está saliendo, en cuanto a rebajar la salinidad y en hacer más infraestructuras", ha afirmado el conseller de Agricultura, Joan Simonet.
Desde el Govern han recordado que su intención es invertir 600 millones de euros en los cuatro años de legislatura para mejorar la gestión del agua impulsando proyectos de mejora y modernización de todas las infraestructuras del ciclo del agua. Por este motivo, firmarán el Pacto de Agua con todos los Consells Insulars.