Un grupo de personas se han apropiado de los molinos y de una casa en mitad del bosque que pertenece al Ajuntament de Palma. Una familia que vive junto al parque ha denunciado, fuera de cámaras, esta situación porque se sienten inseguros e intranquilos y temen que puedan hacerles daño. Han asegurado que La Policía Local los ha desalojado en varias ocasiones, pero siempre regresan a estas construcciones.
El gran problema con el que se encuentran ahora son los comportamientos incívicos. Estas personas realizan botellones en el parque dejando la basura en el suelo, orinan y defecan delante de la gente y, además, se pasean desnudos.
Los vecinos han dejado de acercarse a este parque y reclaman al Ajuntament que cierre el recinto por las noches y que desaloje a los 'okupas', pero temen que les cierren el parque para siempre.