Merecemos extinguirnos

Hay veces que la estupidez humana traspasa los límites de nuestra propia comprensión. Como por ejemplo este hombre que no es capaz de deducir que lleva el casco al revés.

De hecho, es el que graba el que le insiste en varias ocasiones para hacerle entender que debe darle la vuelta.

Es que al final nos extinguiremos nosotros solos.