Sin distancia de seguridad ni mascarillas en las "suspendidas" festes de Sant Joan de Ciutadella
Era un riesgo que se corría, podía pasar y así ha sido. Pese a la suspensión de las fiestas de Sant Joan de Ciutadella, hoy se han concentrado centenares de personas (muchas de ellas llegadas de Mallorca y de otros lugares de la península) frente a Cas Comte, desde donde debería haber salido el fabioler para recoger a los caixers.
No se ha respetado la distancia de seguridad en ningún caso ni tampoco el uso de mascarillas, ofreciendo una pobre imagen que ha disgustado a muchos. El esfuerzo de los menorquines, una de las islas del archipiélago balear con menor incidencia del coronavirus, se ha visto hoy empañado ante la celebración improvisada del primer toc.
Así, a las 14.00 horas, centenares de personas se agolpaban en el carrer Major para asistir al simulacro del primer toc de fabiol. Pedían máximo silencio, móviles en alto, para inmortalizar el momento. Un grito de "Visca es coronavirus!" ha roto el encanto para unos y ha sacabo la media sonrisa a otros.
Sea como sea, la celebración hoy, de este improvisido inicio no oficial de las fiestas de Sant Joan de Ciutadella no ha gustado a todos. Se esperan reacciones de las instituciones menorquinas en las próximas horas valorando la situación que ha sonrojado a más de uno.