La cancelación por motivos sanitarios de la tradicional 'Fira de la Llampuga', una cita clásica en el calendario de las fires de Mallorca desde hace ya 20 años, habría hecho desistir a la mayoría de los mortales, pero no a los comerciantes y restauradores de Cala Rajada, organizadores de la 'Ruta de la Llampuga'.
El evento, que ha durado todo el fin de semana, ha permitido degustar a todos los asistentes las fusiones más sabrosas de la cocina mediterránea y de otras como la japonesa, siempre con la llampuga como ingrediente principal.
El número de negocios que se ha animado a participar en esta ruta ha superado la veintena. El esfuerzo y las ganas de innovar y adaptación de los comerciantes de Cala Rajada ha brindado un evento único que seguro se abre un hueco en el calendario gastronómico de la Isla.