Con carácter de urgencia y con la cuenta atrás para ejecutar el derribo ya en marcha, el Ajuntament de Banyalbufar ha aprobado, en un pleno extraordinario, incluir las 24 ‘alcoves’ del Port des Canonge en su Catálogo de Bienes Patrimoniales.
Con esta decisión, por unanimidad, se quiere convertir a las ‘alcoves’ de simples construcciones a edificios a proteger -con un valor paisajístico, etnológico, histórico y cultural- y, con ello, evitar que se cumpla el ultimátum de Demarcación de Costas, que ya en noviembre pasado advirtió que, al estar fuera de normativa, se procedería a su destrucción.
El organismo del Ministerio de Medio Ambiente español alegó, en ese momento, que las tradicionales ‘casetes’ del Port des Canonge tenían caducada desde hace ya seis años la concesión administrativa que les permitía ocupar la zona marítimo costera. Ante esta advertencia, por escrito, ninguna institución balear -ni el Govern, ni el Consell, ni el propio Ajuntament de Banyalbufar- se habían activado para reconducir la situación.
De hecho, el propio Ajuntament de Banyalbufar ya tenía elaborado el Catálogo de Bienes Patrimoniales desde el pasado año 2014, pero no lo aprobó en pleno, por lo que estaba inoperante. Si se hubiera cumplimentado este sencillo trámite, las urgencias actuales no habrían sido necesarias.
Ahora, ya con el Catálogo aprobado, se remitirá la documentación a Demarcación de Costas con el objetivo de reconducir el proceso y evitar los derribos, una situación similar a la que se da en El Bungalow de la Ciudad Jardín de Palma.