Ante la subida generalizada de precios a causa de la inflación, la partida destinada a llenar el depósito de combustible de los vehículos es, junto a la de los alimentos, de las que más preocupa a los ciudadanos.
Hasta el día 31 de diciembre, el Gobierno bonificaba con 20 céntimos cada litro de carburante repostado, con el objetivo de aliviar el maltrecho bolsillo de los ciudadanos, pero el fin de esa ayuda coincidía con el momento que los españoles se comían la última uva.
Es por ello que los propietarios de vehículos apuraron las últimas horas del año, llenando sus depósitos, e intentando postergar al máximo el volver a pasar por el surtidor con unos precios que, lejos de ser los máximos tras el estallido de la guerra de Ucrania, si aumentaban considerablemente con la desaparición de la bonificación.
Han pasado once días desde entonces e inevitablemente el momento de volver a repostar ha llegado y la gran pregunta ahora es ¿cuál es la tendencia en los precios del combustible? De momento los precios son similares a la última semana de 2022 siendo el precio del gasóleo en torno a 1,70 euros el litro, variando entre diferentes gasolineras de la isla y aumentando en el caso del gasóleo plus.
En cuanto a la gasolina sin plomo, la 98 oscila entre 1,77 y 1,81 euros el litro, mientras que la 95 tiene un precio entre 1,60 y 1,66 euros el litro. Aun así, el presidente de Consubal, Alfonso Rodríguez, advierte de que esta tendencia al alza continuará y, por tanto, los precios, seguirán subiendo.
Y con la desaparición de la famosa bonificación, ¿los conductores han cambiado sus rutinas? ¿Ponen menos, más o igual cantidad de gasolina que antes?
Sea diésel o gasolina, lo que es seguro es que los conductores deberán mirar y comparar el lugar donde repostan, si quieren ahorrar, al menos unos céntimos, al llenar cada depósito.