El objetivo es dar a conocer esta maravilla del patrimonio histórico de Menorca, que, por la complejidad de su situación, es todavía poco conocido, incluso por los propios habitantes de Menorca, en particular, y del resto de las islas de nuestro archipiélago, en general.
El Castillo de San Felipe se construyó a mediados del siglo XVI en la orilla sur de la bocana del puerto de Mahón, para oponerse a los periódicos ataques de la escuadra turca en el Mediterráneo Occidental, que atacó Menorca dos veces en poco más de veinte años.
El Castillo de San Felipe es conocido por “la gran fortaleza escondida”, precisamente porque los visitantes no se esperan encontrar con la enorme cantidad de pasillos bajo tierra construidos para protegerse del asedio de los enemigos.