Mir ha explicado que «hemos asumido un gran reto de conservación, consecuencia directa de la emergencia climática que sufrimos, que gracias a la tarea del personal técnico de la Conselleria y de los centros colaboradores ha sido un éxito». El conseller ha aprovechado la conmemoración del Día mundial de la tortuga marina para recordar que la nidificación de la especie será cada vez más frecuente: «Estamos preparados para recibirlas, pero necesitamos la colaboración de la sociedad para proteger los nidos y los huevos, sobre todo ahora que empieza la época de nidificación».
"Deseamos que esto no tuviera que ser noticia: que las tortugas no estuvieran amenazadas y que la preservación del ecosistema fuera tal que los que viven en el mar todo el año pudieran estar tranquilos y continuar con su vida", ha indicado el alcalde de Capdepera, Rafel Fernández.
Los tres ejemplares son hembras, y una de ellas irá equipada con un dispositivo GPS para poder hacer el seguimiento. Así, Peque pesa 6 kg y 34,1 centímetros; Busi pesa 5,6 kg y mide 34,5 centímetros y Sol 4,35 kg y 31,5 centímetros. La suelta se ha hecho con la participación del CEIP s'Auba de Capdepera.
Hay que recordar que ya ha empezado la época de nidificación de esta especie, por lo cual es importante la colaboración ciudadana para proteger los ejemplares y los posibles huevos. Desde el Consorcio de Recuperación de Fauna de las Illes Balears (COFIB) recuerdan que, si se detecta un rastro de tortuga o un ejemplar, se tiene que llamar inmediatamente al 112 para activar el protocolo, no acercarse al animal ni grabarlo o utilizar luces estridentes en su entorno.
La tortuga marina es una especie catalogada como vulnerable. Históricamente, ha nidificado en el Mediterráneo oriental, pero los últimos años ha intensificado el número de puestas en la vertiente occidental, un fenómeno que los científicos relacionan con la emergencia climática y el incremento de la temperatura del mar.