Los hechos habrían ocurrido cerca del mediodía, cuando el trabajador realizaba tareas de mantenimiento en esta parte del edificio. El joven, por motivos que la Guardia Civil todavía está investigando, se ha precipitado desde una altura aproximada de siete metros, falleciendo prácticamente en el acto.
Hasta el lugar del suceso se han desplazado agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil, además de una ambulancia medicalizada. A pesar de los esfuerzos del personal sanitario, y tras más de media hora intentando reanimar al joven, los médicos desplazados hasta Son Bugadelles no han podido más que certificar el deceso.
La Guardia Civil ya ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias que envuelven a este trágico suceso.