Toni Nadal concluye su etapa de entrenador de su sobrino Rafa una vez finalizada la Copa de Maestros de Londres. El tío del tenista afirma en su carta que ha sido una "feliz etapa de 27 años que se inició el día en que el hijo de mi hermano Sebastián entró en mi pista de tenis con tan solo tres años".
Sobre su sobrino, Nadal solo ha tenido palabras de agradecimiento: "A día de hoy me siento enormemente valorado y querido porque su figura ha engrandecido la mía mucho más de lo que me merezco". El entrenador ha proseguido "gracias a su educación, respeto y pasión he podido desplegar mi manera de entender esta profesión. Gracias a él he vivido experiencias que han superado todos mis sueños como entrenador. He viajado a su lado a sitios increíbles y he conocido a personas relevantes e interesantes de muchos ámbitos".
En la carta de despedida, Toni Nadal también ha querido agradecer la labor del todos los miembros del equipo. "A todos ellos les agradezco su entrega, compromiso, buen hacer y, no menos importante, su amistad", ha recalcado el entrenador. Además, ha tenido buenas palabras para la prensa y los aficionados.
Sobre la trayectoría tenística del número 1 del tenis, Toni Nadal señala que "intenté desarrollar en él un carácter fuerte y resolutivo para poder hacer frente a las dificultades del tenis en particular y de la vida en general" y añade que "nunca le facilité las cosas más de la cuenta a Rafael".
Además, Toni Nadal ha criticado los fanatismos en la política, el deporte y la sociedad en general, advirtiendo que "creo que nos haría bien empezar a moderar nuestras pasiones en el campo deportivo y hacerlo extensivo a todos los demás" ya que estos fanatismos "nos llevan a dar sólo por bueno nuestro punto de vista y a despreciar, infravalorar y hasta odiar, al que piensa o siente distinto a nosotros".
En este sentido, en su carta, el ya exentrenador del tenista mallorquín manifiesta que "nunca he entendido que la rivalidad debiera traspasar los límites del campo de juego ni he considerado a ningún rival como un enemigo. Esto me ha permitido apreciarles, respetarles y aprender de ellos".
Por otro lado, en la carta, el entrenador asegura que pese a acabar su etapa entrenando a su sobrino, seguirá "vinculado al tenis porque mi ilusión y amor por este deporte, por suerte, siguen intactos".
La carta finaliza así: "Gracias de corazón y hasta siempre".
