Pero más allá de esa cuestión, la dirección del PSOE ha visibilizado un cierre de filas total con el Gobierno, como se esperaba que ocurriera en la que ha sido la primera reunión presencial del Comité Federal en más de un año y medio.
A ese cierre total de filas ha contribuido la ausencia en este encuentro de dirigentes críticos con los indultos como el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; el de Aragón, Javier Lambán; el de Extremadura, Guillermo Fernández Vara; y la todavía secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz. No obstante, menos García-Page, el resto han ido en las últimas semanas aceptando las medidas de gracia impulsadas por el Gobierno.
Los dirigentes que sí han participado en el Comité Federal y han tomado la palabra han mostrado explícitamente su apoyo a los indultos, después de que Sánchez, en su intervención inicial, haya reivindicado la "valentía" del PSOE por haber dado este "primer paso" en favor de la convivencia, y haya asegurado que ya se están empezando a notar los efectos positivos de la decisión.
Después, en la intervención que ha realizado a puerta cerrada al término del Comité Federal, Sánchez ha agradecido las muestra de apoyo, y ha vuelto a señalar que aunque comprende las dudas sobre los indultos, no existe otra alternativa, según las fuentes consultadas.
En esta línea se ha posicionado, por ejemplo, la presidenta de Baleares, Francina Armengol, quien también ha aprovechado su turno para defender la necesidad de impulsar la industria turística, en el marco de la lucha contra la Covid y la gestión de los fondos europeos.
También ha alabado la concesión de los indultos el presidente valenciano, Ximo Puig, ya que, aunque ha admitido que no lo resuelven todo, sí considera que eran "necesarios" para consolidar la vía del diálogo.
Eso sí, al mismo tiempo ha querido poner de manifiesto la necesidad de garantizar un sistema de financiación justo y sin privilegios, aprovechando el debate que se va abrir sobre esta cuestión en Cataluña, como parte del proceso de diálogo para acabar con el denominado conflicto catalán.
Además, ha defendido que hay que aprovechar el 40º Congreso Federal que el PSOE celebrará en octubre para fortalecer el partido y al presidente Sánchez, y ha puesto en valor la acción del Gobierno durante la pandemia.
A su vez, el candidato a la Junta del PSOE, Juan Espadas, quien ha tomado la palabra tras Sánchez, ha defendido en su intervención en abierto que existe "un debate pendiente como es la distribución justa de la riqueza, de los recursos a los ciudadanos", y ha abogado por "una financiación para la población, no a los territorios".
Del mismo modo, el dirigente de Aragón Vicente Guillén ha reivindicado que la pluralidad del territorio se debe basar en la igualdad y la cohesión en base a la financiación. Una propuesta esta sobre la financiación que también han apuntado los intervinientes de otras federaciones socialistas como las de La Rioja, Murcia o Cantabria.
Salvador Illa ha sido otro de los 23 dirigentes socialistas que han tomado la palabra en el Comité Federal. Lo ha hecho para agradecer a Pedro Sánchez la "valentía" y el "liderazgo" que ha tenido al aprobar los indultos a los presos del 'procés' por entender que con esto propicia el "reencuentro entre catalanes y catalanas y entre catalanes y el resto de españoles". Y ha trasladado el respaldo de la sociedad catalana a esta medida del Gobierno que ha calificado de "inteligente".
Además, ha querido precisar que el problema no es de Cataluña con España, sino entre catalanes y tras dejar claro que Pere Aragonés tiene que convocar una mesa de partidos en Cataluña, ha advertido de que no caben ni la amnistía ni un referéndum de autodeterminación.
En su opinión, el método es el diálogo, la negociación y el pacto y el límite, el "marco de convivencia". Además, ha enviado también un mensaje a la derecha advirtiendo de que quien representa mayoritariamente al constitucionalismo en Cataluña son los socialistas.
Por su parte, el presidente de Asturias, Adrián Barbón, ha defendido que es necesario impulsar la industria, y ha puesto en valor el sistema de cogobernanza impulsado por el Gobierno para gestionar la pandemia.