El fundador del Davallament, Toni Moragues, ha explicado que "en 1997 fue el primer año que lo llevamos a cabo. Se representa la crucifixión de Jesús y después hay una serie de fases de luz hasta que se desclava a Jesús de la cruz".
"Este año participan unas cincuenta personas en la representación entre actores y colaboradores", ha destacado el director de Interpretación, Emili Martínez, quien ha destacado que "hay muchísimo trabajo detrás". "Hay que darle relevancia al acto y a sus participantes ya que se hace por aficionados y de forma altruista", Guillem Mayol, ayudante de dirección y fotógrafo.
Por su parte, el encargado de representar a Jesús es Toni Vanrell. "Este es el segundo que lo represento aunque es el tercer año que participo en el Davallament".
El Davallament se representa el Viernes Santo a las 21.00 horas y tiene una duración aproximada de 45 minutos. Asimismo, este año el Davallament se realiza un homenaje a Joan Quetglas, uno de los impulsores de la representación.