Así, en el texto enviado, la Conselleria de Educació i Universitats enumera toda una serie de consideraciones y dudas que, apuntan, podrían provocar el colapso de las prácticas formativas no solo en las Illes Balears, sino en el resto del país. Las consecuencias, inmediatas para el alumnado sin posibilidad de titular, también afectarían el sector productivo que no dispondría de profesionales cualificados.
En la carta, se exponen todas y cada una de las dudas en cuanto a la aplicación de la medida.
En primer lugar, y en cuanto a la Formación Profesional, se manifiesta que la norma que la regula no considera como prácticas las estancias formativas de los alumnos en las empresas. También destaca la falta de conocimiento de la Tesorería General de la Seguridad Social en torno al funcionamiento de estas enseñanzas y de las características del alumnado de FP. En lo referente a esto, señala que algunos estudiantes son menores de edad, otros trabajan y estudian a la vez -generando una doble alta en la Seguridad Social-, hay alumnos en situación irregular en España, y subraya que las prácticas sean curriculares, esto es, necesarias para poder obtener el título.
Desde la Conselleria se apunta además al hecho que se desconoce si habrá que tramitar prestaciones de incapacidad temporal, y tampoco aparece recogido en ninguna norma si esta cotización es compatible con la desocupación.Tampoco se ha aclarado si los estudiantes de Enseñanzas Artísticas y de Enseñanzas Deportivas estarían también obligados a cotizar por las prácticas, puesto que legislativamente no son alumnos de FP.