Pau Rigo volverá a sufrir lo que ya ha padecido: sentarse durante horas en la sala de vistas del Tribunal Superior de Justicia de Baleares, revivir los terribles sucesos acaecidos en su casa el 24 de febrero de 2018 y tener que justificarse ante un jurado popular porque utilizó una escopeta para defenderse. Deberá justificar su derecho a la legítima defensa ante dos hombres encapuchados y armados con barras de hierro que asaltaron su propia casa, le agarraron con violencia y amenazaron con torturar a su mujer si no les entregaba sus ahorros.
La magistrada del primer juicio, ahora suspendido, ha declarado nulo el veredicto que consideró en ese momento a Pau Rigo como culpable por autodefenderse disparando su escopeta contra uno de los asaltantes, que murió poco después a causa de las heridas. La presidenta del tribunal reconoce en el auto que ha dictado este martes que la respuesta de los miembros del jurado popular a sus preguntas, sobre la culpabilidad o inocencia del anciano de Porreres, no se ajustó a lo que marca la ley y que ella misma cometió un error al admitirla como válida. Eso sí, la misma jueza magistrada dicta en su auto que no cabe recurso contra su resolución y que, por tanto, la repetición del juicio es incuestionable.
Sin embargo, las partes ya han expresado que, una vez estudiado esta resolución, se reservan la posibilidad de recurrirla ante la misma magistrada o en una instancia superior. Así como la fiscalía y el abogado de la familia del ladrón muerto habían ya reclamado la repetición del juicio, el abogado de Pau Rigo solicita su libre absolución.
El veredicto de condena contra Pau Rigo ha merecido un amplio rechazo social a través de las redes sociales. De hecho, en un grupo de Facebook que ya reúne a casi 10.000 personas se propone organizar una concentración de apoyo al anciano de Porreres.