Poco a poco, ante la inminencia del cambio político, en decenas de despachos oficiales de las instituciones baleares se están vaciando estanterías y cajones. Muchos documentos van directamente a las papeleras. Otros pasan a los archivos y algunos se están metiendo en cajas para irse con sus propietarios.
Y es que hasta 600 altos cargos políticos electos, consellers, secretarios autonómicos, directores generales, gerentes de empresas públicas, jefes de gabinete, asesores parlamentarios y de comunicación y personal eventual nombrados a dedo están a punto de perder sus asientos. De forma paralela al cese de los políticos que les nombraron, ellos también serán despedidos.
Según el Portal de Transparencia del Govern balear, 204 cargos ‘cuelgan’ de Francina Armengol aunque, en este cambio, se podrán mantener en sus despachos unos pocos días más que ella ya que la aún presidenta ha elegido dejar su cargo y optar a ser candidata al Congreso de los Diputados por el PSIB. Un paso hacia Madrid que, pese a haber sido anunciado hace días, oficialmente dará este próximo lunes.
Por tanto, los 204 altos cargos y asesores de Armengol pasarán a hacerlo de la presidenta en funciones, Mae de la Concha, hasta que esta deje el cargo desalojada por Marga Prohens.
En los Consells de Mallorca, Menorca y Formentera, que también vivirán un cambio en sus presidencias, los altos cargos que se irán para dejar el paso a otros que entrarán sumarán varios cientos más.
Una circunstancia que se repetirá en muchos ayuntamientos, especialmente en los de Palma (con 94 altos cargos nombrados a dedo), Calvià (con 27), Marratxí, Alcúdia y Pollença, entre otros en Mallorca, y el de Eivissa Vila.
Estos altos cargos que se irán serán sustituidos por otros de los partidos que asumirán las presidencias de las instituciones, aún ahora sin cuantificar. En el programa electoral del Partido Popular y de VOX, sin embargo, se promete una contención en el gasto público y la eliminación de altos cargos superfluos.