Y es que la Feria Horeca es el lugar idóneo para que los profesionales del sector de la hostelería, la restauración, el catering y el turismo conozcan las últimas novedades en gastronomía, maquinaria y servicios para sus establecimientos, pero también para degustar nuevos productos, mantener reuniones con proveedores, coger ideas y sobre todo, hacer negocios.
"Tengo una explotación porcina y hacemos sobrasada por venta directa. Hemos venido a Horeca para ver todo lo que hay tanto los productos, como los proveedores", ha explicado uno de los visitantes. "Mi hija tiene un puesto a granel en Santa Catalina y vengo a buscar cosas que puedan ir bien para su negocio", señala otro de los asistentes a la feria.
Asimismo, también hay trabajadores que vienen en busca de nuevos productos: "queremos descubrir nuevos productos y proveedores para nuestra empresa de eventos". "Venimos por las novedades y estar detrás de las tendencias", señala otro de los asistentes a la feria Horeca Baleares.
Por otro lado, Horeca también sirve de escaparate a las empresas y proveedores para mostrar a sus potenciales clientes toda su gama de productos. De hecho, la feria permite llegar a más clientes.
El maestro arrocero Kike Martí de Arrózame ha destacado que "evidentemente en Horeca se hacen muchos negocios pero también ayuda a acceder a los clientes, es más fácil que vengan y pasen por nuestro escaparate".
Por su parte, la directora de Marketing y Comunicación Flor de Sal d’Es Trenc, Laura Calvo, ha afirmado que "celebramos el nombramiento como la mejor sal de Europa, evaluándonos de forma sobresaliente".
Es por este motivo que la feria se ha consolidado y se ha acabado convirtiendo en todo un referente para los profesionales del canal Horeca, batiendo edición tras edición cifras de asistencia de público y provocando que el Velódromo Illes Balears se haya quedado pequeño para albergar todos los estands que quieren participar en la feria Horeca.
