A lo largo de la mañana, los operarios han estado trabajando para dejar toda la señalización lista para que los agentes de la Policía Local de Palma pudieran desviar el tránsito de un lado al otro de la vía, sin incidencias.
Una desviación del tránsito que se ha hecho efectiva sobre las 11.15 horas de la mañana. A partir de ahora, los vehículos van a circular por el tramo de carretera más cercana al mar, en la que se han habilitado dos carriles por sentido, para que puedan acometerse las obras que afectan a la calzada y a las aceras del lado interior del Paseo Marítimo de Palma.
Agentes de la Policía Local se han encargado de desviar el tráfico de los vehículos procedentes de la calle de Monsenyor Palmer y de la Avenida Gabriel Alomar en dirección a PortoPí. Un cambio que ha generado cierta confusión entre algunos conductores pero que se ha desarrollado sin incidencias y sin producirse atascos.
De hecho, a lo largo de todo el Paseo Marítimo se han desplegado numerosos agentes de la Policía Local de Palma para evitar que hubiera problemas con la desviación del tráfico ya que gran parte de los semáforos no están operativos.
Con esta modificación se podrá llevar a cabo una nueva fase de las obras que se iniciaron el pasado 18 de noviembre, para las que se ha instalado una valla quilométrica en la zona interior del Paseo Marítimo que ha provocado la desaparición de las terrazas que las cafeterías y restaurantes pudieron poner en la calzada.