Un tiempo de espera que no será superior a los diez minutos en el trayecto que une Inca y la capital balear en las horas punta, desde las 6 y 10 y las 9 y 48 por la mañana y desde la una y diez hasta las seis y ocho por la tarde.
"El transporte público tiene que ser algo que pase de forma continua y que no tengas que esperar 20 minutos para que venga un tren", ha apuntado otro de los usuarios.
En el caso de las líneas de SFM que conectan con Sa Pobla y Manacor el tiempo de espera también se verá reducido en las franjas horarias con más afluencia de usuarios.
Además de poder aprovechar mejor el tiempo, los pasajeros también señalan que con esta ampliación de las frecuencias pueden ir más cómodos y espaciados en el interior de los vagones. "Me parece perfecto, porque a veces se aglomeraba mucha gente y teníamos que estar pegados unos con otros. Con todo esto que ha pasado de la pandemia la verdad es que era un poco arriesgado para nosotros", ha indicado otro pasajero.
Este aumento en las frecuencias del tren de SFM es una de las medidas puestas en marchas desde el Govern para hacer frente a las consecuencias económicas derivadas de la guerra en Ucrania.
