Endesa colabora con la financiación del programa "Espai Solidari" de la Fundación Natzaret, con una aportación de 50.000 euros a través de su Plan de Responsabilidad Pública, dentro de las actuaciones en el cual se encuentra el programa "Endesa Famílies" que, entre otras acciones, pretende la realización de acciones de inclusión sociolaboral a través del acompañamiento para la mejora de la ocupabilidad.

La Fundació Natzaret ha desarrollado un programa denominado "Espai Solidari" con el objetivo fundamental de acompañar a jóvenes vulnerables en su inserción laboral mejorando sus competencias laborales y sociales a través de un programa dividido en cuatro fases (evaluación, preparación, búsqueda activa de ocupación, seguimiento de la ocupación).

Los participantes de este proyecto son 25 jóvenes tutelados o extutelados del servicio de protección de menores y usuarios de la Fundació Natzaret con edades comprendidas entre los 16-25 años.

Además, Endesa, ha aportado 7.000 euros a la Fundació Natzaret para la adquisición de equipos informáticos para la formación de los jóvenes acogidos en la Fundació Natzaret.

II fase del Plan de Responsabilidad Pública de Endesa

La segunda fase del Plan de Responsabilidad Pública de Endesa está dotada con 13 millones de euros, que se añaden a los 12 millones de euros de inversión que la compañía hizo en marzo en la primera fase de su plan. Aquella primera inversión se destinó mayoritariamente a la compra de material sanitario para apoyar a las entidades que estaban luchando en este momento de manera directa contra la covid-19.

La segunda fase del Plan de Responsabilidad Pública de Endesa tiene como objetivo la reactivación socioeconómica y la ayuda a los vulnerables. En este sentido, la compañía ha diseñado un plan de ayudas que se sostiene sobre ejes bien definidos.

Entre ellos, la ocupación es una de las necesidades derivadas de esta crisis, la formación, en esta segunda fase del Plan de Responsabilidad de Endesa, se ha convertido en una ayuda fundamental. En este sentido, Endesa ha activado cursos de formación para acceder al mercado de trabajo, realizando programas para fomentar la ocupabilidad en colectivos en situación vulnerable en desocupación derivada de la pandemia, a través de labores de acompañamiento, formación y desarrollo de competencias.

Con esta segunda fase, la compañía quiere reforzar un mensaje que forma parte de su estrategia global: la necesidad de no dejar a nadie atrás, en cualquier transición energética, económica o social que se plantee. La transición justa, la sostenibilidad, exige que el bien sea para todos.