Así lo ha confirmado en rueda de prensa, donde la consellera ha especificado que "todo dependerá de cómo evolucione la cifra de nuevos contagios en estos días". "Hay medidas que han demostrado efectividad en otros territorios, en otros países o comunidades, pero estaremos vigilantes de lo que suceda en estos días", ha reconocido.
Pese a todo, Gómez, que ha estado acompañada por el portavoz del Comité Autonómico de Gestión de Enfermedades Infecciosas de las Illes Balears, Javier Arranz, ha descartado un confinamiento domiciliario. "Hay muchas medidas que se pueden poner en marcha antes", ha señalado.
Por ejemplo, se ha referido a Formentera, que este lunes pasó a nivel 2 de alerta por la COVID-19, y ha indicado que hay nuevos positivos, pero "están controlados por lo que no hay tanto riesgo de trasmisión". "En Mallorca está todo un poco más difícil", ha dicho. Por este motivo, Gómez ha recordado a la población que intente hacer actividades en el exterior y sobre todo que evite aglomeraciones.
Arran, además, ha recordado a los baleares que sigan las medidas restrictivas frente a la COVID-19 en las reuniones, comidas y cenas de Navidad. Entre los consejos, ha destacado "no tener vergüenza" a llevar la mascarilla puesta durante las reuniones, "no superar el número de seis personas de dos núcleos familiares, usar "mesas amplias", no compartir platos, ventilar los espacios y lavarse las manos con frecuencia.
