Según ha explicado el conseller d’Economia i Hisenda, Bartomeu Escandell, los presupuestos vienen marcados por la pandemia que estamos viviendo, y por este motivo dan prioridad "a las ayudas a los más vulnerables y al sector productivo, así como las ayudas al alquiler para familias y personas afectadas por la crisis de la COVID-19".
Las previsiones de futuro, según ha añadido el conseller Escandell "son inciertas, tras una temporada que ha sido mejor de lo que esperábamos en mayo, pero que pese a ello ha sido corta e irregular. Con esta situación el Consell ha preparado unos presupuestos para afrontar un invierno que se prevé duro para algunas personas de nuestra isla y parte del tejido empresarial para que nadie quede atrás", ha destacado Bartomeu Escandell.
Según ha añadido el conseller, los recursos se reorientan hacia el mantenimiento de la actividad y las ayudas a familias y al sector productivo, y en total se destinarán 2.066.500 euros, cifra que se incrementado en 736.500 euros respecto al 20219, lo que significa una subida del 55%.
Por otro lado, ha explicado que sube el capítulo de inversión y de transferencias corrientes, bajan los ingresos corrientes provenientes de la Comunidad Autónoma, baja el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), y se sigue con deuda bancaria cero.