El comercio ha aplicado todas las medidas de seguridad posibles para combatir el Covid-19. "Hemos hecho un gran esfuerzo, abrimos con miedo porque al ser una tienda de ropa interior, las clientas deben probarse la ropa", ha explicado Salvá.
Con todo, entre las medidas que Corsetería de Tot ha aplicado para su reapertura destaca la toma de la temperatura a las clientas antes de entrar en el establecimiento y el uso obligatorio de mascarillas. "Los clientes deben ponerse gel hidroalcohólico al entrar y guantes por si tienen que tocar o probarse algún producto", ha destacado su propietaria.
Asimismo, se ha señalizado con pegatinas en el suelo la distancia de seguridad que se debe guardar entre los clientes y se ha instalado una mampara de seguridad en la caja. Por otro lado, "se ha habilitado un probador para que las clientas puedan probarse las prendas y el otro se utiliza para depositar las prendas que finalmente no se llevan", ha señalado Salvá, quien ha añadido que "después de casa uso, desinfectamos todo el probador y las prendas".