"Estaba viviendo en Tailandia, estudiando un máster y me quede enganchado al ver cómo hacían este tipo de helado. Se me encendió la bombilla. La verdad es que cuando uno empezó siempre tienes dudas". Posteriormente explicó qué tiene de especial este tipo de helado. "Está hecho a mano sobre una plancha helada que se mantiene a unos -30ºC".
Tal singularidad ha supuesto que en pocos años su negocio haya crecido de forma exponencial. "El momento de expansión empezó en el 2015, después abrimos en Barcelona en 2017 y llegaron 4 tiendas más. En 2018 fue un boom, rompiendo récord de ingresos. En próximos años esperamos establecimientos fuera de España".
Seguidamente analizaba la situación actual y aseguraba que es el momento de mirar a corto plazo y no a largo plazo. "Lo primero que no hay que hacer es mirar a lo lejos porque te puede crear ansiedad, hay que ir día a día. En un día teníamos los 22 establecimientos abiertos y al otro día cerrados. El momento de ahora como muy complicado porque parte de nuestra plantilla se ha visto afectada por un ERTE. Ahora hay que tener tranquilidad y esperar acontecimientos”.
Finalmente agradeció el apoyo de socios, trabajadores e inversores de los últimos años y mostró su solidaridad: "Soy candidato al Premio Rey Jaume I. En mi candidatura ya he dejado por escrito que, si ganó, daré los 100.000 euros al Estado en la lucha contra el COVID-19".
