La identificación de fármacos contra la Covidien-19 se desarrolla a partir de los compuestos químicos que envían el CNB-CSIC varios centros del organismo. Allí, el equipo de los investigadores Pablo Gastaminza y Urtzi Garaigorta realiza el cribado de los compuestos para determinar cuáles podrían ser eficaces como fármacos contra el coronavirus. En primer lugar, se prioriza el cribado de los fármacos que ya están aprobados para su uso, y en segundo lugar se busca generar nuevas moléculas. Una vez elegidos los compuestos deberán someterse a las fases clínicas.
Entre los centros que han aportado sus librerías de compuestos químicos están el Instituto de Química Médica (IQM), el Instituto de Química Orgánica General (IQOG), en el Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIBM), el Instituto de Investigaciones químicas (IIQ), y el Instituto de Biomedicina y Parasitología López-Neyra (IBPLN).
El segundo proyecto lo dirigen los investigadores Hugh REYBURN, desde la inmunología, y José Luis Casasnovas, desde el conocimiento de la estructura de los virus, que producirán proteínas antivirales mediante diferentes estrategias para usarlas en los test de detección de anticuerpos .
La presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, agradeció la donación de Endesa porque "permitirá acelerar varios proyectos priorizados de la Plataforma Temática Interdisciplinaria Salud Global, y poner en valor una compleja cadena de ensayo para soluciones como reposicionamiento de fármacos como antivirales y nuevos test de detección ".
Por su parte, José Bogas, CEO de Endesa, ha destacado que "proporcionar recursos económicos a instituciones y organizaciones sociales para que puedan disponer de medios suficientes con los que ampliar su labor es uno de los tres pilares del Plan de Responsabilidad Pública de Endesa. Esta donación al CSIC es, para nosotros, el ejemplo perfecto de cómo podemos ser útiles a la sociedad donde más y cuando más se necesita ".
