En su condición de gestora, a través de sus ONGs y entidades del tercer sector de centros de menores no acompañados, la Red ha mostrado su "profunda consternación" por estos hechos dados a conocer recientemente. "Estos hechos merecen y deben ser objeto de la completa y total repulsa", han manifestado.
Ante esto, la Red ha dado instrucciones a los servicios jurídicos para que, a través del cuerpo de procuradores de la entidad en Palma, se proceda a la personación de la entidad como acusación popular cuando las diligencias se sustancien, para que sean los tribunales, quienes procedan "a esclarecer y determinar el alcance y responsabilidad" de estos hechos.
No obstante, han explicado que es "vital" que se evite "la estigmatización de los menores" y ha manifestado que es "necesario y urgente" el anteponer "el interés superior del menor, máxime si ha sido víctima". Por esto, llama a los poderes públicos y la ciudadanía "a respetar expresamente su anonimato".
La Red mantendrá una ronda de trabajo con los agentes institucionales implicados para garantizar que se están dando "las máximas garantías" en la acogida de la infancia y la infancia migrante y buscará "analizar los protocolos seguidos para determinar los posibles fallos de la red".
