La formación liderada por el presidente, Pedro Sánchez, no pierde adeptos tras superar los primeros 100 días de legislatura, en los que se produjeron dos dimisiones de altos cargos dentro de la Ejecutiva nacional. El PSOE se alza como posible ganador de unas elecciones nacionales con un 30,5%.
El Gobierno socialista se desmarca, y por mucho, del resto de formaciones. La llegada de Pedro Sánchez a los despachos de La Moncloa le han otorgado a los socialistas una gran ventaja con respecto al resto de políticos.
El recién elegido líder del Partido Popular, Pablo Casado, se encuentra detrás del PSOE con un 20,8% de intención de voto. Le siguen Ciudadanos, con un 19,6% y Unidos Podemos con un 16,1%.
La suma de los partidos de centro izquierda aumenta su ventaja sobre las centro derecha con respecto al sondeo anterior. Ante el 46,6% que suman PSOE y Unidos Podemos, PP y Ciudadanos se quedan en un 40,4%.
El barómetro de este mes es el segundo desde que Sánchez asumiera la presidencia y el líder del Ejecutivo va sumando adeptos. Sin embargo, los datos recabados por el CIS se recogieron entre el 1 y 11 de septiembre de este año, muy poco antes de la dimisión de la ex ministra de Sanidad, Carmen Montón. Pedro Sánchez se ha librado, por los pelos, de que el sondeo recogiera los datos de sus peores días como presidente: cuando se le cuestionó por su tesis doctoral.