De esta forma, Javier Hidalgo se convierte en el segundo accionista de Globalia, por detrás de su padre Juan José Hidalgo, el empresario salmantino que fundó el grupo turístico y del que es actual presidente, que controla el 51%.
Tras hacerse con esta participación, Javier Hidalgo controla el 10% y regresa al accionariado del grupo turístico tras cinco años fuera, cuando en 2013 vendió su participación del 5% al empresario y exministro balear Abel Matutes.
Para el consejero delegado de Globalia, puesto al que llegó en septiembre de 2016, esta operación refleja su apuesta "clara y rotunda" por el proyecto del grupo turístico, sus empresas y sus empleados y muestra así su "firme apuesta" por consolidar al grupo turístico como referente del sector.
La operación supone también la salida del Banco Santander del accionariado del grupo turístico. El banco presidido por Ana Botín controlaba hasta ahora el 9,9% de Globalia, participación heredada de Banco Popular tras su adquisición.
Además, otra hija del fundador de Globalia, Cristina Hidalgo, directora de Compras del grupo desde septiembre del año pasado, ha aumentado su participación en el accionariado hasta el 7,04% tras comprar un 1,9% a Tirema.
Inversiones Tirema, de la Fundación Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno, ostentaba hasta ahora un 2% del capital social la empresa matriz de Air Europa, Halcón Viajes, Be Live Hotels y Travelplan.
Entre los accionistas minoritarios de Globalia también figuran Unicaja (7%), Abel Matutes (5,14%), así como otros familiares del fundador del grupo como su esposa Avelina Gutiérrez (5%), su hermano Juan Antonio Hidalgo (9,1%) y su hija María José (5,14%).