Son ya más de 2.200 empresas catalanas que han trasladado su sede social y fiscal para no perder los privilegios de los Estados miembros de la Unión Europea. Florit ha advertido que el número de empresas trasladadas es "muy alto", y más, teniendo en cuenta que "son de las más importantes de Catalunya" que "significan el 30% del PIB catalán".
El abogado Florit ha aclarado que las empresas no necesitan trasladar su lugar de actividad o de producción, ya que es la sede social y fiscal la que establece la nacionalidad de la empresa. Además de los privilegios de la UE, las empresas "trasladan su sede, también, para evitar el boicot a productos catalanes" ha añadido.
En conclusión, Florit ha explicado que las empresas catalanas están buscando "un territorio seguro hasta que se esclarezca la situación de Catalunya".
