Según han informado fuentes del Instituto Armado a Europa Press, la operación la desarrolla la Policía Judicial de la Guardia Civil en Baleares. Se han practicado varios registros en domicilios y locales industriales en Calvià y Palma. La investigación se encuentra bajo secreto judicial.
En junio dos británicos fueron detenidos en Alcúdia por incitar a los turistas a poner denuncias falsas.
RECLAMACIONES POR INTOXICACIONES FALSAS
La legislación británica permite reclamar por intoxicaciones alimentarias desde Reino Unido a través del touroperador, incluso habiendo pasado dos años, sin necesidad de presentar justificante o pericial médica. A continuación los touroperadores abonan la indemnización al consumidor y después la descuentan al hotel, de forma que es éste quien finalmente paga sin haber podido defenderse.
Según denunció en junio una cadena hotelera mallorquina (que ha conseguido que un juzgado de instrucción de Palma abra una investigación), existen despachos de abogados británicos que captan a potenciales clientes tanto través de redes sociales como físicamente (mediante personas que merodean por las inmediaciones de los hoteles).
La cadena denunció ante las autoridades que los abogados británicos proponen a los turistas plantear estas reclamaciones y a cambio se llevarían alrededor de un 60% de la indemnización, generalmente de entre 7.000 y 8.000 euros.
