En dos años, según ha explicado el Ayuntamiento de Palma, el número de usuarios de este servicio se ha incrementado en un 31 por ciento y la media de usos diarios, en un 41 por ciento.
De este modo, la compra permitirá retirar las 67 bicicletas que se encuentren en peor estado y, también, incrementar el número de unidades a la calle, que pasará de 257 bicis a 300. Además, quedará un remanente de 30 que se guardarán en el taller para atender urgencias.
El regidor de Movilidad, Joan Ferrer, ha destacado que esta adquisición "es un nuevo paso para mejorar el servicio de Bicipalma". "Necesitábamos renovar las bicis porque algunas por su gran uso habían quedado obsoletas, nos provocaban muchas reparaciones y era preciso incorporar nuevas", ha asegurado Ferrer.
El Área de Movilidad ha adquirido 100 bicicletas y las otras 40 las ha comprado la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Proyectos (Smap). En total, se han invertido 63.525 euros y cada bicicleta ha tenido un coste de 453,75 euros.
Desde el Consistirio han explicado que antes de la incorporación de las nuevas bicicletas, la edad media de la flota era de tres años y tres meses y unos 1895 usos de media. Con las nuevas, la edad bajará hasta 1 año y 11 meses y 1095 usos de media.
Actualmente, hay 2.528 usuarios activos, frente a los 1.934 de 2016 en este mismo día y los 1.919 de 2015. Respecto a los usos, sen abril de 2017 fue de 814 usos diarios, mientras que en el mismo mes de 2015 fue de 576.
"Estas cifras demuestran que el trabajo se está haciendo bien, evidencian que cada vez que crecemos en estaciones de Bicipalma suben también el número de usuarios, que nuestra apuesta por la movilidad sostenible crece cada día más", ha explicado Ferrer.