Algunos de estos vecinos han acudido este jueves al pleno del Ajuntament de Palma para mostrar su indignación y hacerse oír ante la pésima situación en la que viven."Todo está degenerado, el que vive allí es porque no tiene más remedio. La convivencia es muy dura, hay personas mayores que tienen mucho miedo a salir de sus casas porque reciben amenazas de muerte", ha destacado la presidenta.
Pese a sus solicitudes, el consistorio no quiere saber nada de ellos, ni de la iluminación, ni de la limpieza de los pasajes entre bloques de pisos, pues alegan que son propiedad privada. "No tenemos luz porque nos llegó una factura de 48.000 euros a la que no podemos hacer frente, de dónde sacamos este dinero", se pregunta Hernández.
Pero ese no es el único de los problemas, los vecinos llevan años ignorados por Cort pues ninguno de los equipos de gobierno que han pasado por el Ajuntament de Palma ha sido capaz de encontrar una solución a los problemas del barrio. "Nos prometen cosas que no se hacen y si se llegan a llevar a cabo es por nuestra insistencia, de nosotros no se acuerda nadie, nos tienen olvidados", ha criticado María Gavina Hernández.