El campeonato en Primera División está paralizado, al igual que el resto de actividades deportivas en todo el país, como consecuencia del estado de alarma decretado por el Gobierno español en la lucha contra la pandemia del coronavirus.
El equipo bermellón, decimoctavo con 25 puntos, ocupa una plaza de descenso a falta de once partidos para que finalice el campeonato, el primero de ellos, en el estadio Son Moix frente al FC Barcelona, si LaLiga se reanuda.
Después, tendría que viajar para enfrentarse al Villarreal, Real Madrid, Athlétic de Bilbao, Atlético de Madrid, Sevilla y Osasuna. En su estadio de Son Moix recibiría, tras medirse al Barcelona, al Leganés, Celta, Levante y Granada.
«Yo quiero que se juegue la competición para que cada uno pueda terminar donde se merezca, o lo que la clasificación final dictamine», señala Moreno, en declaraciones que recoge el club balear.
El entrenador mallorquinista insiste en que «sería lo más justo» jugar los partidos que restan para no finalizar de manera abrupta LaLiga, suspendida desde la jornada vigésimo séptima por el COVID-19.
«Lo más justo es terminar cuando se tenga que hacer y que cada uno se gane lo que tenga que tener, y sus derechos, en el terreno de juego», señaló el entrenador mallorquinista.
