El técnico andaluz pide que “vengan a ayudar” y “apoyen” al conjunto mallorquín para que cuando las fuerzas flaqueen “se note el empuje desde la grada. “Son Moix tiene que ser el sexto jugador y no dudo que será así. Que sepan que para nosotros son muy importantes. Son los partidos que a los jugadores les gusta jugar. Sabemos que el pabellón va a estar completamente lleno, que vamos a tener el apoyo de nuestra afición y es importante que Son Moix vuelva a ser el de las grandes citas. Cuando viene un equipo de este calibre a los jugadores no les falta motivación”, manifestaba Vadillo.
Para el entrenador del Palma el parido llega “en un buen momento” porque el equipo llega en “buenas condiciones” tras recuperar la mayoría de jugadores lesionados durante el parón de la competición y espera “un partido igualado”. Vadillo reclama a su equipo que sean “verticales” porque le “gustaría que fuera un partido abierto”. Además, avisa que su equipo tendrá “que jugar a un ritmo muy alto porque Inter lo va a exigir”. Consciente de la dificultad del choque, Vadillo confía en las posibilidades de su equipo y considera que se tienen que hacer fuertes en casa. “Nos viene el mejor equipo del mundo, lo viene demostrando las últimas temporadas. Sabemos que es un partido bastante difícil, que tenemos que dar nuestra mejor versión y dar un nivel muy alto para sacar algo positivo. Un equipo como el nuestro tiene que competir al máximo nivel, da igual el rival que sea y más en casa con nuestro pabellón lleno”, explicaba. Por último, Vadillo lamentaba la baja de Ricardinho porque que “juegue es bueno para el fútbol sala y para nuestra afición” y no se podrá dar.