Horas difíciles para el Palma Futsal después de la derrota en Antequera que supuso despedirse de una competición a la que tanto cuerpo técnico como jugadores le tenían especial ilusión. Vadillo reconoce esta eliminación “ha sido un palo muy grande para todos los jugadores, cuerpo técnico y el club, pero no queda otra que levantarnos, ese partido ya no lo vamos a ganar, así que toca levantarnos que mañana tenemos un gran rival enfrente”. Y así es, casi sin tiempo para recuperarse, el cuadro balear afronta una de las jornadas más duras y bonitas de la liga con un partido contra Movistar Inter: “El deporte de élite cada dos días te da una nueva oportunidad. Vamos a tener un rival bastante difícil, pero no nos queda otra que mirar adelante, afrontar el partido con la máxima garantía, olvidar lo que nos ocurrió, recuperar sensaciones y hacer un buen partido para tener posibilidades de sumar”.
El conjunto madrileño se presenta en Son Moix con una victoria de los últimos cinco partidos y Vadillo destaca que “están teniendo continuidad y ha tenido resultados bastante amplios ganando a Jaén, Xota…con resultados contundentes. Yo creo que es un equipo que esta temporada ha tenido muchos cambios pero es un equipo muy enérgico, correoso y con mucha calidad que nos va exigir estar a nuestro máximo nivel”. Para este partido, el Palma Futsal solo podrá contar con 200 aficionados en sus gradas debido a la entrada en fase 4 de la isla. El entrenador del conjunto mallorquín cree que “es una lástima porque al final nuestros aficionados son muy importantes para nosotros, veníamos metiendo la máxima capacidad. Es una lástima, pero prima el tiempo que estamos atravesando y los problemas que nos está creando la pandemia”.