El Palma Futsal entra en la fase decisiva de la temporada en quinta posición y a tres puntos de la cuarta plaza y a cuatro de la tercera. Las victorias frente a Movistar Inter y Barça Lassa en las últimas jornadas han servido para reivindicar el papel de los baleares y recuperar parte del terreno perdido en la clasificación. Los triunfos ante los grandes, dos de los tres han hincado la rodilla en el Palau Municipal d’Esports de Son Moix, suponen un plus de confianza pero de poco sirven si luego se falla ante rivales del mismo nivel o de los de la zona baja. La falta de regularidad ha sido el gran problema de los baleares esta temporada y la anterior y ahora buscan encontrarla aprovechando el empujón que han dado las victorias del último mes. No será fácil ya que cada equipo se juega mucho en esta fase final de la fase regular y las diferencias se reducen al esfuerzo y ser competitivo en cada partido sea cual sea el rival.
La realidad es que pocos recuerdan una temporada tan igualada como ésta, en la que los humildes se hayan rebelado de tal forma que los tres grandes han cosechado más derrotas que en cualquier otro curso. Esto hace que equipos como el Osasuna Magna sea el tercero en la tabla por delante del Movistar Inter o que el Palma Futsal tenga a tiro a los madrileños y la tercera plaza como objetivo para esta fase final. Ahora bien, cada partido será una pelea incesante como la de este sábado en la pista de Naturpellet Segovia. El técnico de los baleares, Antonio Vadillo, afirma que “nos vamos a enfrentar a un rival que no pasa por buenos momentos a extradeportivo pero a nivel deportivo consiguieron una victoria importante ante Cartagena. Son jugadores jóvenes pero con calidad y con un buen entrenador e ir a Segovia a jugar un partido, si me pongo en el lugar de los jugadores, es un gran atractivo porque es una de las catedrales de nuestro deporte, un pabellón y un club con mucha historia y cada vez que se pisa el Pedro Delgado es muy bonito” y añade que “nosotros tenemos que seguir con nuestra línea, la de competir a nuestro máximo nivel, que es la que nos acerca a los triunfos. El partido ante el Barcelona demuestra, una vez más, que cuando nosotros competimos a nuestro máximo nivel somos un rival difícil de batir y los últimos cuatro partidos, más allá de los resultados, el equipo ha competido a su máximo nivel. Ahora hay que buscar la regularidad y todo pasa por el partido de Segovia. Sabemos que será difícil, más allá de lo que dice la clasificación y las plantillas, sin ir más lejos podemos echar la vista atrás y ver como Segovia ganó con amplia ventaja en el marcador a Cartagena y tenemos que salir desde el segundo uno a por el partido y a por los tres puntos”.
El gran reto para los próximos meses es acabar con la irregularidad que ha acompañado al equipo esta temporada. “No podemos tener los picos de irregularidad y el reto que tenemos ahora es ser más regulares. No podemos venir de en quince días jugar dos veces contra Inter y otra contra Barcelona y conseguir dos victorias pero lo importante es la imagen, cómo se ha competido a después tener los bajones en ciertos partidos de falta de competitividad y nuestro reto ahora es ese hasta el final de la liga” reconoce Vadillo. El técnico asegura que el partido de este sábado “es muy importante porque estamos enganchados por la pelea por la tercera y cuarta posición, Jaén también viene apretando por detrás y son tres puntos vitales para nosotros y para nuestras aspiraciones. Tenemos que ser conscientes de la importancia que tiene el partido más allá del partido en sí”.