Llegan los últimos cinco partidos. Dícese de aquellos que deciden las cuestiones en juego a la largo de una temporada. Raramente antes de esta fecha se han despejado las incógnitas que rodean a las competiciones y que suelen decidirse en el tramo final en el que se adentra la Primera División de fútbol sala y con casi todo por resolver. El Palma Futsal llega al último esfuerzo cargado de necesidades tras una temporada irregular y con la obligación de ganar para no meterse en mayores problemas. El equipo es séptimo, a dos puntos de la sexta plaza, objetivo que se ha marcado en rojo el vestuario tras perder demasiado terreno con la planta noble y no puede dormirse porque solo tiene cuatro puntos de ventaja sobre el noveno clasificado por lo que otra derrota podría poner en peligro el play off.
En esta situación llega el Palma Futsal al desenlace de la temporada. Queda mucho por jugar pero cada vez menos y los errores ya pueden ser definitivos. Los de Antonio Vadillo cambian de horario este viernes para recibir al Naturpellet Segovia. El partido se adelanta a las 12:30 horas aprovechando el Viernes Santo y para facilitar el acceso de las familias y los niños con la coincidencia de la jornada festiva. Toda ayuda es poca para empujar al equipo a la victoria y recuperar el terreno perdido y a eso se aferran los jugadores conscientes de la fuerza que cobran en los partidos como locales. La derrota de la semana pasada en Santa Coloma exige de una reacción inmediata este viernes y, por ello, en el vestuario han reflexionado durante la semana para corregir los errores y que se vea la mejor versión del equipo esta semana ante su afición. Quedan quince puntos en juego y cada partido ya es una final aunque en el Palma el reto se marca a corto plazo para sacar el máximo de victorias posibles y atar la sexta plaza de cara al play off. Enfrente estará el Naturpellet Segovia, uno de los pocos equipos que no se va a jugar nada trascendente en esta recta final de competición. Los castellano leoneses están prácticamente salvados y es muy complicado que alcancen el play off, por tanto, jugarán sin presión, un valor añadido y que puede multiplicar su peligrosidad ante un equipo necesitado como es el balear.
El técnico balear no podrá contar con Ángel Claudino, que aterrizará en Palma este mismo viernes tras desplazarse a su país para resolver varios trámites administrativos necesarios tras incorporarse al club el pasado mes de enero. En cambio, recupera a Diego Nunes, cuya gestión fue más rápida y ha llegado ya procedente de Brasil. Además, cuenta con varios jugadores que arrastran molestias por lo que hasta la misma mañana del partido no realizará la convocatoria. Vadillo reconoce que “es imperiosamente importante ganar. No teníamos margen de error y cada error que cometemos nos lleva a no sumar los tres puntos y se acercan los de detrás, se alejan los de delante y nos metemos en problemas. Es un partido importante para seguir metidos en playoff y luego para tratar de recuperar la sexta plaza” y reitera que “tenemos que ganar, es una necesidad imperiosa para seguir en la pelea y luchar por la sexta plaza, que no era acorde a nuestro objetivo principal, pero quizás nos hemos equivocado nosotros porque los objetivos tienen que ser día a día”. Sobre su plantilla, el técnico manifiesta que “yo confío mucho en ellos. A la mayoría los conozco porque han sido compañeros, sé que son muy buenos jugadores y las cosas no están saliendo. Confío en ellos, nos enfadamos porque no estamos haciendo las cosas bien y hay que buscar una solución. Nos tenemos que encontrar a nosotros mismos y lo necesitamos” mientras que del rival destaca que "tiene una combinación de juventud y veteranos, equipo descarado, vertical, que hace buen fútbol sala. Son chicos que juegan de una manera muy atrevida y si no estamos muy concentrados y no damos nuestro máximo nivel será un partido complicado".
El partido podrá verse, en directo, en el streaming de la página web de la LNFS.