Creo que el Málaga hizo más por conseguir la victoria; salió con más empuje, presionando al Mallorca y con más tiempo rondando nuestra área; la presión que hicieron casi todo el partido impidió que desarrolláramos nuestro juego y hubo muchas imprecisiones y robos de balón en la zona de defensa y medio campo, que provocaban continua inquietud. No es que gozasen de muchísimas ocasiones claras, alguna sí, pero rondaban los dominios de Reina, que nuevamente tuvo intervenciones de mérito.
El equipo fue el mismo de la semana anterior pero la posición en el campo fue mucho más retrasada que en el partido contra el Rayo Majadahonda. Los malaguistas nos obligaron a ese repliegue y anularon prácticamente todo nuestro juego aunque es verdad que pegamos un par de latigazos que algo asustaron a los andaluces; la más clara, aparte del gol, fue la de Budimir en su remate en el área pequeña. El juego no fluía y las penetraciones por banda tampoco; alternaron la posición Aridai y Lago Junior en varias ocasiones del partido, para ver si por ahí desconcertaban un poco a sus pares y además no progresaban tanto, sobre todo el lateral derecho malaguista que se prodigó mucho en ataque. Pero el equipo supo sufrir y es algo que hay poner en el haber de Vicente Moreno; también el hecho de que incluso los jugadores que no están en el once titular, cuando saltan al terreno de juego lo dan todo; el gol viene de una asistencia de Abdón Prats y un remate de Leo Suárez, que habían entrado no hacía muchos minutos.
Y se consiguió una victoria importantísima, quizás la que más hasta la fecha, por el momento de la temporada en que se produce, por el rival ante el que se logra y por la inyección de moral y confianza que supone para jugadores, técnicos y aficionados, a falta de seis partidos. Y la recompensa aunque excesiva por el juego, merecidísima por el esfuerzo y pundonor desplegado por todos. Pero es importante que sepamos sacar conclusiones de un partido en el que realmente no hemos merecido la victoria y ésta no puede empañarnos la visión de las muchas cosas que habría que mejorar en el encuentro de ayer; es muy posible que tengamos que enfrentarnos nuevamente a éste rival o parecido en los deseados y tan cerca play-off; y es difícil que, jugando igual, volvamos a ganar.
El domingo en Son Moix, a las 4 de la tarde, podríamos dar un paso de gigante hacia la clasificación para el play-off contra un rival directo como es el Sporting. Será otro partido muy complicado pero pase lo que pase otra semana más estaremos en los puestos de privilegio.
