«Siento emoción, no puedo dejar de pensar en el trabajo, en los chavales de las ventanas, en mi familia, en mis compañeros... Pienso en toda la gente que nos ha apoyado y que ha confiado siempre en este equipo. Y, sobre todo, me acuerdo de mi hermana», señaló ante los medios de comunicación.
El balear, que ha superado a Nino Buscató y ya es el cuarto español con más partidos internaciones (223), resaltó también la final que se les presenta el domingo. «Estar en una final de Copa del Mundo es algo increíble. Yo lo he vivido solo una vez y gracias a lo del 2006 he podido levantar esa copa. Ahora tengo otra nueva oportunidad», manifestó.
Sobre el duelo, Rudy explicó que la forma de ganar, «muy merecida», tras dos prórrogas, representa «el carácter» del grupo de Sergio Scariolo. «Hemos hecho un partido completísimo contra una grandísima selección, no bajando nunca los brazos, siempre creyendo en poder ganar y con todo el esfuerzo y el carácter que representa este equipo», subrayó.
«Estar en una final tiene mucho que ver con el esfuerzo de todos los jugadores. Sabíamos que al principio no estábamos de la mejor forma, pero hemos ido creciendo en el torneo. Hoy se ha visto una grandísima selección con una gran experiencia en los minutos finales y eso es lo que nos ha dado el pase a la final», prosiguió.