Al término del partido, Nadal mandó un recado a Kyrgios: "No creo que sea un mal chico, para nada. Creo que es un buen chico, pero le falta un poco de respeto al público, hacia el rival y hacia sí mismo también. Eso es lo que debe mejorar. Hoy hay que felicitarle, ha ganado y le deseo lo mejor".
En un duelo de una sola rotura de saque, Kyrgios y Nadal se enredaron en una lucha encendida durante 3:03 horas, decidida por una doble falta del español en el momento crucial. Nadal se fue delante con un 'break' en el sexto juego del primer set en el que el rival se quejó de dolores de estómago, a pesar de haber mostrado buen nivel. Rafa ganó 6-3 y se encaminó al triunfo, pero a partir de ahí los aires cambiaron.Los dos marcaron su territorio con el servicio y se neutralizaron, Nadal mostró el tenis completo y Kyrgios una devolución precisa en momentos decisivos con lo que llegaron 6-6 al final de la segunda manga. En el arranque del 'tie break' el 72 del mundo hizo uno de sus 21 'aces' para tomar ventaja, romper el saque rival un par de veces y vencer por 6-2 para empatar el duelo.
Los malos modales de KyrgiosLos dos rivales insistieron en el servicio como prioridad y no pudieron marcar diferencia hasta que en el sexto juego de la tercera manga Nadal se puso 0-40 pero acabó desaprovechando esas tres bolas de 'break'. Una vez recuperado de su momento de debilidad, Kyrgios sacó a relucir sus malos modales, hizo un servicio de abajo hacia arriba y le reclamó al árbitro. Su juego siguió potente y llegaron a un nuevo 'tie-break' en la manga decisiva. Rafa hizo un 'mini-break' para tomar ventaja de 4-2 y tuvo punto de partido con su saque con el marcador 6-5 a su favor. Lanzó una pelota a la línea que paralizó al estadio porque el australiano pidió revisión y el ojo de halcón la marcó fuera. Fue un golpe anímico en contra de Nadal que hizo una doble falta para darle ventaja 7-6 al rival que con su portentoso saque se hizo del punto decisivo en uno de los mejores partidos en los 26 años de historia del Abierto de Acapulco.