"Mis líneas maestras son las de trabajar, esforzarnos, implicarnos la máximo sabiendo que tenemos una distancia que recortar con los equipos que están más arriba pero conscientes de que cada fin de semana solo podemos sumar tres puntos ganando, que es lo único que vale en el fútbol. La manera es jugando bien al fútbol, siendo protagonistas, siendo un equipo valiente, agresivo, llevando el peso del partido y sufriendo cuando toque. Teniendo personalidad, siendo valientes, ambiciosos, presionando arriba y con las cosas claras", aclaró sobre su estilo de juego que qiere poner en práctica desde el primer minuto: "El equipo que quiero se tiene que ver el fin de semana, tenemos que marcarnos la meta de inculcar a los jugadores lo que queremos desde mañana. Esa es mi obligación. No podemos perder tiempo porque conozco la complicación e igualdad de esta categoría. Lo más importante es lo que te puedan transmitir los futbolistas, cuales son sus sensaciones, que es lo que sienten en el terreno de juego, como se sienten cómodos y ayudarles. Tenemos que darles soluciones porque ellos tienen la profesionalidad, capacidad, el fútbol, la calidad en sus botas".
A pesar de la premura de tiempos no quiere precipitarse: "Primero voy a hablar con los jugadores, a percibir y tocar al grupo, y a partir de ahí tomar decisiones que tienen que ser lo mejor para el grupo porque al final, lo que verdaderamente necesitamos es que todos vayamos juntos: afición, jugadores, Club, cuerpo técnico, prensa...porque a todos nos une lo mismo, que es ganar. Cuanto más unidos estemos más fácil va a ser conseguir las victorias porque lo que todos queremos es el ascenso. Da igual cómo se consiga".
