Aunque Dreyer ya pasa página y no piensa en nada más que Retogal Boiro, próximo rival en liga, y del que espera sea un partido tan duro como el de este pasado miércoles en Son Moix.
Marcos Dreyer repasó ante los medios de comunicación el rendimiento del equipo en el partido contra Melilla. El técnico brasileño aseguró, sin ningún tapujo ninguno, que “no esperaba remontar a Melilla, en mi cabeza estaba pensando qué contar cuando terminara el partido y estaba prácticamente perdido. No podemos confiar en que esto vuelva suceder porque hay un factor de suerte que no podemos contar con él. Una remontada de seis puntos sin el factor suerte es imposible y ayer lo tuvimos”. Dreyer cree que fue el factor suerte el determinante, aunque afirmó que “la parte positiva del miércoles fue la reacción del equipo en el cuarto set y después en el quinto que también se complicó un poco al final. Nos encontramos un rival muy fuerte, que nos jugó muy bien, tomó sus riesgos y estoy feliz por los puntos porque estuve a punto de no llevarme nada”.
Ahora el entrenador del Urbia U Energia ya piensa en el próximo rival de liga, el Retogal Boiro, un equipo que aseguró “es un buen equipo, muy ordenado, fuerte físicamente y con un buen bloqueo. Es un equipo de este nivel, como el nuestro porque ahora no puedo decir que somos superiores a Melilla y tenemos un gran desafío y espero poder sacarlo adelante”. Será el tercer partido del equipo en una semana y Marcos Dreyer se mostró preocupado por el desgaste que puede suponer a sus jugadores: “Me preocupa el viaje, pero también nos tenemos que adaptar, también puede ser que ganásemos el partido de ayer porque Melilla tiene que venir de ahí a jugar aquí, nosotros venimos de Canarias, así que es una locura. Hay dificultades de viajes, para comer, en los desplazamientos, menos vuelos, está todo más complicado, pero para todos. Yo confío que mis jugadores se adapten y podamos seguir dando nivel”, concluyó el brasileño.