"El tema es que cuando acabe la liga no tengamos que mirar para arriba, eso sí, cuanto antes mejor para evitar nervios o dudas pero el objetivo es el mismo. Yo preferiría haber sido campeón hace dos meses pero tenemos que esperar como mínimo hasta este domingo".
"El Lleida quiere llegar a los 59 puntos y el empate para ellos no es bueno, tienen que ganar aquí y el partido será más abierto y vistoso. Su nivel de anotación ha bajado, en la primera vuelta tenía a Pedro y Otuño, los dos máximos goleadores pero aquí siempre hemos anulados a los rivales y por qué va a ser diferente".
"No pensamos en tarjetas ni administrar tiempos hasta que no ganemos la liga. No pensamos en Alicante ni Hércules, solo en Lleida, en ser primeros y punto. Me da la sensación que los jugadores no tienen ansiedad. Los 21 jugadores están bien, a nadie le duele nada".