El conjunto de Aguirre se pareció más al equipo del año pasado que al del actual. Fue mejor en las áreas y se adjudicó tres puntos que le suponen coger aire y alejarse de la zona de descenso. El Sevilla se queda con 13 puntos, uno por debajo de los bermellones y el futuro de Diego Alonso se tambalea.
Los primeros minutos fueron trepidantes, el Mallorca salió a por el partido y el Sevilla pudo adelantarse en el marcador pero surgió la figura del mejor Rajkovic. El guardameta serbio taponó todos los agujeros de la defensa bermellona y se impuso a un Ocampos que se fue diluyendo durante el transcurrir del juego. Minutos después aparecería la figura de Larin. El delantero canadiense marcaría el único tanto del partido con un gran remate desde la frontal con su pierna izquierda y poco a poco se parece al futbolista del año pasado en Valladolid.
Ya en la segunda mitad, el Sevilla no creo una sola jugada de peligro y sólo planteaba apuros para la defensa bermellona con lanzamientos desde la frontal del área. En uno de ellos Pedrosa, con la ayuda de En Nesyri empataba el partido, pero el gol no subiría al marcador ya que el rebote sobre el delantero marroquí fue sobre el codo.
En los últimos minutos, Antonio Sánchez pudo sentenciar el partido pero al mallorquín le faltó acierto y finura para superar a Dmitrovic en el uno contra uno. El Sevilla buscó igualar el resultado, pero la defensa bermellona respondió sin fisuras y los tres puntos se quedaron en Son Moix.
