En cuanto al encuentro Espanyol-Mallorca, LaLiga señala que unos 500 aficionados locales dirigieron insultos hacia el Fútbol Club Barcelona y hacia el portero visitante.
También que en el minuto 80 desde la grada baja de la tribuna presidencial se lanzaron dos mecheros que no impactaron en nadie, incidente que no apreció el equipo arbitral, aunque tras el partido, la directora de seguridad y el contacto principal del club informaron que el aficionado responsable del lanzamiento fue identificado, sin ser socio ni abonado del club, además de propuesto para sanción y expulsado del estadio.
El escrito de LaLiga refleja que en el Elche-Betis unos 400 aficionados locales insultaron en dos ocasiones al portero chileno del Betis, Claudio Bravo, y también al árbitro, y que unos 300 seguidores visitantes hicieron lo propio al insultar el entrenador local, Pablo Machín.
También hace constar, respecto al partido Sevilla-Osasuna, que unos mil aficionados locales profirieron insultos en dos ocasiones hacia el conjunto navarro.
LaLiga remite cada semana un escrito de denuncia al Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) y a la Comisión Antiviolencia con aquellos cánticos que se producen en los encuentros que inciten a la violencia o tengan un contenido insultante o intolerante.